La Flor es uno de esos locales que tienen un nosequéquequéseyo por el que en poco tiempo se convierten en punto de encuentro de un determinado grupo social: hipsters, modennos, gente de la farándula... y los que se apuntan a un bombardeo.
Decorado con más gusto que medios, aún conserva algunas de los viejos muebles del bar que fue hace años como parte del collage.
Disparidad en las mesas, en la vajilla, en la gente que lo frecuenta y en lo que allí se hace, pues es uno de esos sitios en los que puedes tomarte una copa junto a un grupo que está cenando y otros que simplemente se han ido de cañas, y se han liado.
Muy recomendables sus generosas tostas, sobre todo la de lacón con queso y crema de castañas.
Casas Reales, 25
Santiago de Compostela
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