82. ¡que no se pueda fumar en los restaurantes!

Sé que este post puede ser muy impopular, y estoy pensando en concreto en alguna amiga mía que es como una chimenea pluriempleada.
Estoy encantada de la vida de que ya no dejen fumar en restaurantes ni discotecas. Levantarme el domingo sin apestar como si me hubiese liado a lametones con un cenicero es una sensación maravillosa.

Dicen los de los restaurantes que los hábitos de consumo empiezan a variar: que llegamos antes y se reducen las sobremesas... lo que permite que los que no fumamos reconquistemos espacios, como el Salón Social del Hotel Quinta da Auga.
Después de cenar de maravilla en su restaurante Filigrana,






nos pasaron al salón social (con bastante poco tacto, hay que reconocerlo) para los cafés. Cafés que se transformaron en copazos sin restricciones horarias y a nuestro aire.





P.D La empanada de maíz sigue estando de fábula. Los postres han mejorado un poco (muy recomendable la filloa caramelizada)... pero aún no me ponen los ojillos en blanco

Comentarios

  1. Coincido contigo,en que no se pueda fumar en los restaurantes,y eso que soy fumadora(habrá gente que fume que no entienda que opine así)
    Yo pienso;que la gente que no fume no tiene porque estar comiendo con una chimenea al lado.

    ResponderEliminar
  2. Pues sí... sobre todo si sales con alguien que fuma, y que ni se plantea escoger otro sitio para cenar que no sea el reservado para fumadores.
    Había ido un montón de veces a este restaurante, pero es la primera vez que pude comer en el salón blanco.

    ResponderEliminar
  3. Es delicioso que los restaurantes, cafeterías y demás huelan a lo que deben, es decir, comidita rica, cafelito calentito, y etc.
    Aunque ahora están que muerden los "pobres fumadores apestaos" pasando frío en las terrazas y con los dedos violetas, llegará el día en que reconocerán que viven, y comen, mucho mejor.
    Es genial

    ResponderEliminar
  4. Tú que eres tan de postres, ya habrás visto que no me olvidé de tí, y no me he dejado atrás la observación sobre lo que, para nosotras, es prácticamente lo mejor de la comida.

    Por cierto, el vino: Pétalos del Bierzo, volvió a cumplir las expectativas.
    Precio bien y muuuuy especial.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario