Pelos tengo un manojo, bastante díscolo pero es lo que hay. Ahora, piel sólo tengo una y es mi intención llegar con ella intacta hasta los 135 años que voy a vivir.
Es por eso que, aunque todavía pueda aprovechar algún que otro día de playa, ya he empezado mi plan de recuperación post-vacacional.
El sol es genial y te deja un colorcillo maravilloso, pero por lo visto mi epidermis no es de la misma opinión, así que la compenso un poco por las horas adorando a Lorenzo sobre la arena con unas dosis extra de Clarins.
La exfoliación es uno de mis procesos favoritos. Es de las pocas cosas que notas sus efectos en cuanto terminas (esto es un pelín terrible porque a veces me descubro a mi misma tocándome la cara bastante satisfecha con lo suavecilla que te queda).
Mi favorito es el Doux Nettoyant Gommant Express a la Sève d'orange, un producto tan suave que podría usarse casi a diario. No lo hagáis, la piel se acostumbra enseguida y luego se vuelve una caprichosa.
Yo lo tengo en la ducha y lo hago en tres segunditos un par de veces por semana.
Lo que viene de vicio en septiembre, es añadir un extra de hidratación a nuestras cremitas habituales. La Masque Créme Anti-soif es una gozada porque no añade grasa, y si tienes la piel mixta ¡más te vale que así sea!
Para pieles un poco más secas, en Clarins recomiendan también algo más contundente, como el Doble Serum Gèneration 6.
En mi caso particular sólo recurro a este tipo de productos cuando se produce un estado de emergencia. Es decir: una quemadura solar o un invierno especialmente duro. Unos días de cura... ¡y lista!
Hay un producto que aún no he probado y que tiene una pinta excelente para prolongar un poquito el bronceado a la vez que aportas hidratación: La Crème de Soins Multi-Hydratante Teintée.
Promete ser uno de esos productos para ir "con buena cara" sin ir maquillada que Clarins borda.
A ver.
P.D Querida Ría de Ares: te debo un post sobre cuidados básicos para treinteañeras principiantes. No me olvido.
Es por eso que, aunque todavía pueda aprovechar algún que otro día de playa, ya he empezado mi plan de recuperación post-vacacional.
El sol es genial y te deja un colorcillo maravilloso, pero por lo visto mi epidermis no es de la misma opinión, así que la compenso un poco por las horas adorando a Lorenzo sobre la arena con unas dosis extra de Clarins.
La exfoliación es uno de mis procesos favoritos. Es de las pocas cosas que notas sus efectos en cuanto terminas (esto es un pelín terrible porque a veces me descubro a mi misma tocándome la cara bastante satisfecha con lo suavecilla que te queda).
Mi favorito es el Doux Nettoyant Gommant Express a la Sève d'orange, un producto tan suave que podría usarse casi a diario. No lo hagáis, la piel se acostumbra enseguida y luego se vuelve una caprichosa.
Yo lo tengo en la ducha y lo hago en tres segunditos un par de veces por semana.
Lo que viene de vicio en septiembre, es añadir un extra de hidratación a nuestras cremitas habituales. La Masque Créme Anti-soif es una gozada porque no añade grasa, y si tienes la piel mixta ¡más te vale que así sea!
Para pieles un poco más secas, en Clarins recomiendan también algo más contundente, como el Doble Serum Gèneration 6.
En mi caso particular sólo recurro a este tipo de productos cuando se produce un estado de emergencia. Es decir: una quemadura solar o un invierno especialmente duro. Unos días de cura... ¡y lista!
Hay un producto que aún no he probado y que tiene una pinta excelente para prolongar un poquito el bronceado a la vez que aportas hidratación: La Crème de Soins Multi-Hydratante Teintée.
Promete ser uno de esos productos para ir "con buena cara" sin ir maquillada que Clarins borda.
A ver.
P.D Querida Ría de Ares: te debo un post sobre cuidados básicos para treinteañeras principiantes. No me olvido.
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